Por Dr. Joseph Mercola, Mercola, 23 de octubre del 2020.

HISTORIA EN BREVE

  • El estreñimiento crónico ha sido relacionado con varios problemas de salud graves, incluyendo: diverticulitis, enfermedades renales, ciertos tipos de cáncer, hipertiroidismo, enfermedad de Parkinson y muchos más
  • Defecar en cuclillas, hacer ejercicio regularmente y consumir una alimentación rica en fibra de alimentos reales, podría contribuir considerablemente para solucionar el problema. Además, ciertos alimentos podrían ser utilizados para aliviar y ayudar a combatir el estreñimiento

Las estimaciones sugieren que entre el 15 y el 20 % de la población en general experimenta estreñimiento crónico, caracterizado por heces duras, secas y difíciles de eliminar o tienen menos de tres deposiciones semanales.

Aunque el estreñimiento temporal podría ser tan solo el resultado de alimentarse de forma deficiente durante uno o dos días, el estreñimiento crónico ha sido relacionado con otra serie de problemas de salud más graves, incluyendo:

  • Diverticulitis
  • Enfermedades renales
  • Cáncer colorrectal y gástrico
  • Colitis isquémica
  • Enfermedad de Parkinson

Causas y factores de riesgo

Las heces son el resultado final de la digestión, que comienza en la boca y termina en el intestino grueso. Cuando mastica, los alimentos se mezclan con la saliva, lo que inicia el proceso digestivo para descomponerlos.

A medida que los alimentos logran llegar a su intestino delgado, los nutrientes y el agua son extraídos, lo que deja solo los residuos que su cuerpo no puede utilizar.

escala de heces de bristol

Una serie de factores podrían afectar la consistencia y movilidad de sus heces, lo cual aumenta su riesgo de desarrollar un estreñimiento crónico. Dichos factores incluyen:

A menudo, la deficiencia de microbios intestinales beneficiosos, es causada por la falta de fibra alimenticia.

De igual forma, una alimentación con bajo contenido en fibra hace que sus intestinos se vuelvan más vulnerables a las infecciones. La fibra promueve heces más blandas, voluminosas, y ayuda a mantener intactas las paredes intestinales

Ciertos medicamentos y suplementos (como los antidepresivos, opiáceos, antiácidos, medicamentos para la presión arterial, diuréticos y los suplementos de hierro)
Uso excesivo o crónico de laxantes Una necesidad de evacuación intestinal que es frecuentemente ignorada (por ejemplo, por evitar utilizar baños públicos)
Deshidratación Deficiencia de magnesio

Asimismo, los siguientes grupos de alto riesgo son más propensos a experimentar un estreñimiento crónico:

Mujeres, especialmente durante el embarazo o después del parto. El peso del bebé en desarrollo normalmente se asienta en los intestinos y puede disminuir la motilidad o el movimiento de las heces a través del tracto digestivo.

A medida que el movimiento de las heces se ralentiza, el cuerpo extrae una mayor cantidad de agua, lo que causa que las heces sean duras, secas y difíciles de eliminar.

Adultos mayores, debido a que tienen un menor nivel de actividad física y a la desaceleración de su tracto digestivo.

Las personas que acaban de tener una cirugía. Podrían estar intranquilos al intentar eliminar, haber reducido su movilidad física y/o, posiblemente, que no consuman una alimentación normal, todo lo cual podría contribuir al estreñimiento.

Las personas que tienen menores ingresos, ya que es posible que tengan el poder adquisitivo para comprar frutas y vegetales que proveen fibra a la alimentación.

Además, ciertas enfermedades médicas podrían afectar la capacidad que tiene su tracto intestinal para funcionar normalmente, incluyendo:

Enfermedades que causan bloqueo, tales como tumores, inflamación o hinchazón y/o fisura anal Diabetes
Enfermedades que afectan los nervios intestinales Lesiones de la médula espinal, cerebrales y derrames cerebrales
Enfermedades que afectan a los músculos que eliminan las heces. Músculos pélvicos debilitados, o músculos pélvicos que no pueden coordinar la relajación y contracción (disinergia) Enfermedades que ralentizan el movimiento de los intestinos, tales como la neuropatía autónoma y la esclerosis múltiple (EM, por sus siglas en inglés)
Enfermedades que afectan a sus hormonas, tales como el hiperparatiroidismo y el hipotiroidismo Síndrome del intestino irritable (SII) y/o enfermedad inflamatoria intestinal (EII)

Conexión entre el estreñimiento y la salud

El estreñimiento crónico no debe tomarse a la ligera. Aparte de causar dolor y afectar su calidad de vida, podría tener un impacto significativo en su salud en general. Para empezar, es posible que tener un esfuerzo defecatorio crónico y experimentar heces dolorosas le predispongan para tener grandes hemorroides, que podrían ser muy molestos y dolorosos.

Su colon fue diseñado para contener unas cuantas libras de heces, pero cuando su colon padece estreñimiento, este podría contener hasta 10 libras de heces duras y secas. El gran volumen de heces, por sí solo, podría estirar el colon, irritar el revestimiento del mismo (mucosa) y producir toxinas mientras espera para ser eliminado.

Además, el estreñimiento crónico podría ocasionar un desgarro anal (fisura anal). Estas fisuras son producidas por un traumatismo en el revestimiento interno del ano.

De igual manera, tratar de eliminar una gran cantidad de heces duras podría ocasionar que algunos de sus intestinos sobresalgan por el ano (prolapso rectal), lo que requiere una intervención quirúrgica.

Aplazar la cirugía aumenta el riesgo de un mayor estiramiento del esfínter anal, así como de la porción intestinal que sobresale. El estreñimiento crónico también podría afectar la salud genital y urinaria de las mujeres.

Debido a que el colon y los órganos reproductivos femeninos están estructuralmente cerca, la presión de una gran cantidad de heces en el colon podría ocasionar un prolapso rectal en la vagina, aumentar la posibilidad de que la vejiga no se vacíe completamente, o cause un reflujo de orina desde la vejiga de regreso a los riñones, llamado reflujo vesicoureteral.

Este reflujo produce daño renal permanente y aumenta el riesgo de infecciones renales. El estreñimiento crónico también aumenta el riesgo de enfermedades renales en los hombres.

El estreñimiento crónico podría aumentar su riesgo de enfermedades renales

Según una investigación de 2016, los hombres y las mujeres que sufrían de estreñimiento tenían, en promedio, un riesgo 13 % más alto de enfermedades renales que las personas que no estaban crónicamente estreñidas. El estudio tuvo un período de seguimiento de siete años. Asimismo, los participantes tuvieron un riesgo 9 % más alto de insuficiencia renal.

En general, el estreñimiento severo produjo un deterioro más rápido de la función renal, aunque el mecanismo exacto no pudo ser determinado.

De acuerdo con el coautor del estudio, el Dr. Csaba Kovesdy, profesor de medicina en el área de Nefrología en el Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Tennessee y Centro Médico para Veteranos (VA, por sus siglas en inglés) en Memphis:

Nuestros descubrimientos señalan un vínculo plausible entre el intestino y los riñones, y proporcionan información adicional [dentro de las posibles causas de enfermedad renal].

Nuestros resultados sugieren la necesidad de una cuidadosa observación de la función renal en la trayectoria de los pacientes con estreñimiento, particularmente entre las personas con estreñimiento severo“.

La relación entre el estreñimiento y la enfermedad de Parkinson

Su salud intestinal y salud cerebral están estrechamente conectadas. Un sinnúmero de estudios ha profundizado en el rol de las bacterias intestinales dentro del funcionamiento del eje intestinal-cerebral, y cómo benefician a su salud mental y psicológica.

Por ejemplo, cada vez más se reconoce que la ansiedad, depresión — y otros trastornos del estado de ánimo — en parte, se encuentran relacionados con un microbioma desequilibrado. Esta interconexión también podría aclarar por qué el estreñimiento crónico está relacionado con una enfermedad neurológica como el Parkinson.

En un estudio en ratones, se descubrió que las proteínas implicadas en la enfermedad viajaron desde el intestino hasta el cerebro, a lo largo varias semanas. Estos descubrimientos sugieren que, en algunos casos, la enfermedad de Parkinson podría tener sus orígenes en el intestino. La pregunta es, ¿qué es lo que ocasiona que la alfa-sinucleína se acumule en el intestino? Nadie lo sabe con seguridad, pero las teorías incluyen:

  • Presencia de bacterias que producen curli (un compuesto que provoca una acumulación de alfa-sinucleína)
  • Exposición a plaguicidas
  • Reflujo ácido
  • Inflamación crónica

La alfa-sinucleína sintética — una proteína que se acumula en el cerebro de las personas que padecen Parkinson— fue inyectada en el estómago y los intestinos de los ratones. Después de siete días, se observaron aglomeraciones de alfa-sinucleína en los intestinos de los animales.

Estas aglomeraciones alcanzaron sus niveles máximos después de 21 días. Para entonces, también se observaron cúmulos de alfa-sinucleína en el nervio vago, que conecta el intestino con el cerebro. Como señaló Science News:

Sesenta días después de las inyecciones, la alfa-sinucleína se había acumulado en el mesencéfalo, una región llena de células nerviosas que producen la sustancia química mensajera, dopamina. Estas son las células nerviosas que mueren en las personas que padecen Parkinson, un trastorno cerebral progresivo que afecta el movimiento.

Un segundo estudio sugiere que después de llegar al cerebro, la alfa-sinucleína se propaga, en parte, gracias a las células cerebrales llamadas astrocitos. Los experimentos celulares en las cajas de petri mostraron que los astrocitos podrían almacenar y difundir la alfa-sinucleína entre las células…

A medida que las aglomeraciones de alfa-sinucleína se arrastraban lentamente hacia el cerebro, los ratones comenzaron a exhibir problemas de movimiento e intestinales… Los ratones se parecían, en muchos aspectos, a otros ratones con mutaciones que causan síntomas parecidos al Parkinson…“.

Alimentos que alivian el estreñimiento

Si tiene problemas frecuentes de estreñimiento, tomar un laxante podría ser una opción tentadora. Sin embargo, al hacerlo simplemente podría exacerbar el problema, ya que es posible que utilizar laxantes constantemente le cause dependencia.

En vez de ello, su mejor opción es abordar su alimentación. Los alimentos procesados contribuyen al estreñimiento en un sinnúmero de formas, por lo que podría funcionar intercambiarlos por alimentos enteros y frescos.

Generalmente, los alimentos procesados no solamente tienen un bajo contenido de fibra, también tienden a tener niveles elevados de azúcares y granos que alimentan las bacterias intestinales perjudiciales. También, debería añadir una mayor cantidad de alimentos específicos, conocidos por aliviar el estreñimiento.

Alimentos Ingrediente(s) que ayuda(n) a aliviar el estreñimiento
El agua y/o bebidas calientes, tales como el té o agua caliente con limón Si sus heces son secas debido a la deshidratación, consumir una mayor cantidad de agua podría solucionar el problema.

Beba suficiente cantidad de agua hasta que su orina tenga un color pajizo. Si es de color amarillo oscuro, entonces se encuentra deshidratado. Si es incolora, bebe demasiada cantidad de agua

Vegetales de hojas, tales como las espinacas, acelgas y la col rizada Fibra, magnesio y agua
Aguacate Magnesio
Vegetales fermentados Bacterias beneficiosas (probióticos), fibra y enzimas digestivas
El yogur que se hace de la leche orgánica y sin pasteurizar de animales alimentados con pastura Bacterias beneficiosas (probióticos)
Ciruelas pasa Fibra. Además, su piel tiene ligeras propiedades laxantes
Rábanos El compuesto que promueve un peristaltismo saludable (relajación y contracción intestinal)
Semillas de linaza (recién molidas) Fibra
Psyllium orgánico Fibra
Frijoles Fibra, magnesio
Chocolate amargo (cacao) Magnesio
Aceitunas y aceite de oliva Promueven la producción de bilis, que ayuda a la digestión. Las grasas también promueven la salud de la pared intestinal y para suavizar las heces.

Sin embargo, está CONTRAINDICADO para bebés y niños pequeños. En vez de ello, utilice una pequeña cantidad de puré de ciruelas.

Además, por favor, recuerde que la gran parte del aceite de oliva que se vende en los Estados Unidos es adulterado. Así que tenga mucho cuidado e investigue previamente

Higos y pasta de higos Fibra y prebióticos. También, aumenta la producción de mucina (proteínas que forman una barrera física que protege su pared intestinal del daño) y mejora el peristaltismo
Aloe vera o sábila Actúa como un laxante estimulante. Ayuda con la digestión de proteínas y ayuda a fortalecer los músculos intestinales.

Sin embargo, CONTRAINDICADO en las mujeres embarazadas o lactantes, niños, diabéticos y personas con hemorroides, problemas renales, enfermedades intestinales, tales como la enfermedad de Crohn, y las personas que son alérgicas a las plantas que pertenecen a la familia de las liliaceae, tales como las cebollas, ajo y tulipanes

Suplemento de magnesio Magnesio
Aceite de ricino Funciona como un laxante estimulante, ya que causa que el intestino delgado tenga un mayor movimiento y contracciones.

¡TENGA CUIDADO! El aceite de ricino también se utiliza para inducir el vómito, por lo que debe utilizarse con moderación y solo como un remedio a corto plazo u ocasional, en vez de los laxantes químicos.

Una dosis típica es de aproximadamente 15 mililitros (ml), o alrededor de 3 cucharaditas.

SIN EMBARGO, ESTÁ CONTRAINDICADO EN LAS MUJERES EMBARAZADAS, YA QUE ESTIMULA LAS CONTRACCIONES UTERINAS Y PODRÍA CAUSAR DAÑO FETAL, INCLUYENDO ANORMALIDADES FETALES.

También, está contraindicado si tiene sangrado rectal, dolor estomacal, síntomas de apendicitis, de intestino bloqueado, vómitos

Utilizarlo de forma prolongada podría causar graves efectos adversos, incluyendo deshidratación, diarrea, agotamiento de potasio, desnutrición, debilidad muscular e inflamación intestinal

Estar en cuclillas y hacer ejercicio podría reducir el estreñimiento

La posición que utiliza cuando acude al baño podría afectar significativamente la facilidad con la que hace sus deposiciones. También, podría influir en el riesgo de problemas intestinales y pélvicos, tales como el estreñimiento, hemorroides y más.

La mayoría de personas probablemente se sientan para evacuar sus intestinos; pero esto requiere aplicar una fuerza adicional (esfuerzo), que tiene efectos biológicos indeseables, incluyendo una interrupción temporal en el flujo cardíaco.

Sentarse en un baño moderno implica colocar las rodillas en un ángulo de 90 grados a su abdomen. Sin embargo, la posición en cuclillas tradicional para evacuar coloca las rodillas mucho más cerca de su torso, y esta posición cambia realmente la relación espacial de los órganos intestinales y su musculatura, al optimizar la fuerza implicada en la defecación.

Estar en cuclillas endereza el recto, relaja el músculo puborectal y permite hacer un completo vaciado del intestino ciego y apéndice sin esfuerzo, lo que evita el estancamiento fecal y la acumulación de toxinas en el tracto intestinal. Si tiene problemas con sus evacuaciones intestinales, especialmente por el estreñimiento, le insto a que intente hacerlo en posición de cuclillas.

Los banquitos e inodoros especiales que hacen que su cuerpo realice una posición de cuclillas, podrían ayudarle a acercarse a lo ideal, incluso si lo ha realizado sentado durante décadas. Una solución sencilla y económica es colocar un banquito cerca de su inodoro. Al colocar los pies en el banquito levantará las rodillas para simular una posición en cuclillas.

Los bebes, niños y los adolescentes que sufren de estreñimiento crónico también podrían obtener ayuda a través de los ejercicios de postura y cuclillas, que ayudan a fortalecer sus músculos pélvicos. Las investigaciones muestran que, en la gran mayoría de los casos, al fomentar una adecuada posición en cuclillas, el estreñimiento funcional podría solucionarse.

Además, hacer ejercicio de forma regular podría ayudar a reducir el estreñimiento. El movimiento físico ayuda a aumentar la motilidad en el tracto digestivo y podría estimular el deseo de tener una evacuación intestinal. De igual forma, cuando sienta la necesidad, no espere. Cuanto más tiempo pasen las heces en su colon, más cantidad de agua será eliminada, y más difícil será hacer las deposiciones.

A favor de la salud, la justicia, las sustentabilidad, la paz y la democracia.