Por José Antonio Román, La Jornada, 2 de enero de 2019

La migración resultado del cambio climático podría ascender a 140 millones de personas en todo el planeta durante los próximos 30 años, de los cuales más de un millón de desplazados serían solamente de México y Centroamérica, señaló Alfredo Sandoval Villalobos, académico del Departamento de Física y Matemáticas de la Universidad Iberoamericana (Uia) y miembro del Sistema Nacional de Investigadores.

Con análisis de varios informes y estudios de agencias internacionales especialistas en medio ambiente, el investigador estima que el calentamiento global agudizará la crisis migratoria en nuestro país y América Central.

Advierte que las mismas agencias ubican a Centroamérica como una región especialmente vulnerable a los efectos de eventos tales como ondas de calor mortales, huracanes, destrucción de ecosistemas e inundaciones extremas derivadas del aumento del nivel de los mares, situación que generaría migraciones masivas.

“Si bien los especialistas del Banco Mundial consideran que la mayor parte de los flujos migratorios se desarrollarán dentro de cada país, también advierten que estos procesos requerirán de cuidadosas planeaciones fundamentadas en un profundo conocimiento de las ciencias ambientales, y de un sentido de solidaridad social que aún está lejos de estar presente en la mayoría de los gobiernos involucrados”, dice Sandoval Villalobos, quien cita el estudio sobre la migración climática en América Latina, publicado por el Banco Mundial, en el primer semestre de 2018.

Incluso, añade que uno de los estudios que ejemplifica la gravedad de la situación climática en América Central fue publicado en la revista Nature a principios del mismo año, en el cual se advierte que el aumento del nivel del mar será causa de un incremento en la frecuencia de inundaciones extremas en diversos puntos situados en las costas de México, El Salvador, Guatemala y Honduras.

Pero al acercarnos a 2050, las inundaciones que se presentaban una vez al siglo ocurrirán cada uno o dos años y necesariamente alterarán tanto a los ecosistemas como a las economías locales, provocando flujos migratorios.

De no existir estrategias fundamentadas en el conocimiento científico por parte de gobiernos y poblaciones, las crisis derivadas de los fenómenos migratorios alcanzarán niveles sin paralelo en la historia de la humanidad, señala el investigador de la Uia, al citar las conclusiones del panel científico de la ONU sobre los riesgos por calentamiento global.