Por MsC Milagros Alonso Pérez, Sierra Maestra, 26 de septiembre de 2022.

A estos eventos, que han sumado más de 32 mil participantes, se adicionan las reuniones mensuales con agroecólogos, y una evaluación diaria del trabajo realizado para obtener alimentos sanos. Esto se traduce en cifras alentadoras, que hablan de una labor sostenida, de más de 4 mil facilitadores, e igual cantidad de promotores.

El territorio dispone de más de 8 mil fincas, con una cantidad superior a las 2 mil en transformación al camino de la agroecología. La conservación del suelo, el intercambio con el productor agropecuario para analizar sus problemáticas, la autopreparación, la búsqueda del conocimiento en la literatura, el autoestudio, son de los aspectos imprescindibles para construir un movimiento con bases sólidas.

La divulgación de estos saberes, la guía de campesinos líderes en la materia, el empleo de fertilizantes y el control de plagas con recursos propios e iniciativas personales, el rol de la organización de base para la integración de este movimiento en la estructura, la incorporación de la mujer y los jóvenes, de la familia en general, son acciones que benefician a las producciones en el surco con destino a la población.

A esto se suma la integración con otras instituciones como la Universidad de Oriente, que de igual manera apoya el desarrollo local y el cuidado del medio ambiente. Próximamente, para el evento internacional de agroecología, Santiago ya cuenta con sus representantes, escogidos en el Evento Provincial de Agroecología: “Agricultura sostenible, inocuidad de los alimentos y cooperativismo”.

Ellos son: William Rondón Cortina, de la CCS Domingo Hernández de Boniato, con el tema “Práctica agroecológica en las montañas de Santiago”; Sonia Tur Torres, con la propuesta “Alternativas para alimento animal”, de la finca agroecológica El arroyito de la CCS Rogelio Castellanos de Palma Soriano, y Evin Blan Chacón de la CCS Seguidores de la Generación del Centenario, con el título “Envase de miel ecológica en los canutos de bambú”.

De sus aportes, Rondón Cortina afirmó que: “en el territorio llueve poco y, por consiguiente, al existir muchas pendientes en los campos, las pocas veces que cae el agua los arrastres dejan el suelo sin penetración. Sin embargo, con la práctica agroecológica el terreno se mantiene fértil, se protege la flora y la fauna, aumentan las producciones agropecuarias, la economía familiar se beneficia, así como los habitantes de la comunidad”.

Asimismo, Tur Torres destacó que su: “finca está conformada por plantas medicinales, frutales, viandas, hortalizas y condimentos, y los desechos se emplean para hacer el compost o alimento animal”.

También, de sus resultados, Blan Chacón señaló que: “los recipientes o tanques que facilita la Empresa Apícola contienen zinc, que no es ecológico, a diferencia del bambú seco. Se les hacen una rosca y grabado, o sea que no van a emplear ningún tipo de etiqueta. Esta iniciativa también le ahorra dinero al país. Tenemos pensado crear nuestra propia Mipyme con estas ideas, para lo cual ya contamos con un inversor extranjero y más de 130 colmenas”.

La capacidad de aprovechar cada recurso de la naturaleza de forma sustentable, constituye un impulso al desarrollo agroecológico, el camino a la soberanía alimentaria que necesita la economía de Santiago de Cuba y el país.

A favor de la salud, la justicia, las sustentabilidad, la paz y la democracia.