Por Néstor Jiménez, La Jornada, 06 de octubre del 2020.

Al catalogar al maíz como el supermán de las plantas de cultivo, por su adaptación a todos los climas en México, indicó que los campesinos temporaleros producen lo suficiente para alimentar potencialmente a 54.7 millones de personas, pero eso no se concreta por las dificultades de transporte del alimento.

Por su parte, el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), Víctor Manuel Villalobos, afirmó que en el país no hay consumo ni producción de maíz blanco transgénico para consumo humano, pero sí se usa maíz amarillo transgénico importado que se destina al ganado y a la industria. Aseguró que la intención del gobierno federal es sustituir gradualmente el uso de maíz transgénico amarillo.

Ayer, durante la conferencia de prensa diaria de programas del Bienestar en Palacio Nacional, José Sarukhán subrayó que para garantizar sistemas autónomos de producción no dependientes de las corporaciones agroindustriales, se requiere a los herederos y guardianes del conocimiento, es decir, a los propios campesinos, para que se mantengan los cultivos nativos.

“Para pasar de lo que siembro en el campo a la mesa de las familias, sino hay un paso entre eso no sirve de nada lo que siembro, porque no hay manera de que ese esfuerzo de siembra acabe retribuido por uso de esos materiales… que sean los ingredientes originales de esos campesinos a los que debemos todo. Para eso simplemente lo que requerimos es toda una cadena, en un programa, en una política nacional que una desde qué siembro hasta cómo hago que se ponga en la mesa”, agregó.

Mientras, el titular de Sader detalló que como consecuencia de que el programa Producción para el Bienestar llegó a 100 por ciento de su meta este año, se prevé que la producción de maíz grano, trigo, frijol y arroz se incrementará en 8 por ciento respecto del año pasado.

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