Por Dr. Mercola, Tome Control de su Salud, 11 de marzo de 2024.

HISTORIA EN BREVE

  • Elija vegetales que se puedan enlatar, fermentar o encurtir para que pueda comerlos en cualquier comento, o aquellos que se puedan almacenar durante meses sin necesidad de refrigerarlos
  • Los mejores alimentos para plantar en tiempos difíciles incluyen papas, ejotes, cebollas Heirloom, zanahorias, calabazas de invierno y okra
  • Además de brindarle vegetales frescos sin tener que ir al supermercado, la jardinería es una forma sencilla de reducir el estrés, otro beneficio muy importante en tiempos de crisis

🩺Por el Dr. Mercola

En la actualidad, la idea de ser lo más autosuficiente posible se vuelve cada vez más atractiva, incluso, algunas personas se están interesando por primera vez en la jardinería.

A finales de marzo de 2020, la Universidad Estatal de Oregón eliminó el costo de su curso de horticultura en línea, y a la semana siguiente se inscribieron 15 000 personas. De no haber eliminado el costo, solo se habrían registrado de dos a cinco personas en ese período de tiempo. Asimismo, las empresas de semillas han reportado “un aumento sin precedentes de pedidos”, mientras que los viveros experimentan un aumento en sus ventas.1

Elliot Dasler, propietario de un vivero en Oregón, dijo para KOIN 6 News que la manera en la que ha despegado su negocio, “ha sido como un incendio forestal”.2 En tiempos de crisis, lo ideal es cultivar los alimentos básicos y las plantas que sabe que crecerán bien; no es momento de probar variedades nuevas ni experimentales. Aún mejor, elija vegetales que se puedan enlatar, fermentar o encurtir para que pueda comerlos en cualquier comento, o aquellos que se puedan conservar durante meses sin necesidad de refrigerarlos.

Estos alimentos pueden ser muy fáciles de cultivar en su propio jardín. Si es una persona que busca poner a prueba su habilidad en la jardinería, ya sea para reducir el estrés, por sustentabilidad o ambos, aquí hablaremos sobre algunos de los mejores vegetales que puede cultivar durante una crisis.

‘Cultivos de crisis’ básicos para plantar en su jardín

La empresa Hoss Tools, que se ubica en el estado de Georgia, ofrece herramientas, semillas y otros suministros para cultivar sus propios alimentos, incluso para las personas interesadas en vivir como agricultores o en llevar un estilo de vida autosuficiente. Estos son los alimentos principales para plantar en tiempos difíciles:

Papas: se pueden almacenar hasta por seis meses, lo que ofrece una fuente de nutrición que no requiere refrigerarse. También se pueden enlatar, lo que aumenta su vida útil de tres a cinco años. Hoss Tools recomienda plantar papas dos o tres semanas antes de la última helada, en hileras con 36 pulgadas (66 cm) de distancia entre cada una. Cabe recalcar que debe agregar composta al suelo antes de plantar.

Sus variedades favoritas incluyen las Kennebec, una papa blanca redonda con pulpa cremosa y con contenido de almidón bajo a medio, y las Yukon Gold, que tienen una pulpa amarilla mantecosa. La Red Norland, que es una papa de tamaño mediano, color rosa, con pulpa densa y bajo contenido de almidón, es otra que recomiendan.

Es importante destacar que a las papas les encanta la tierra, lo que significa que puede agregar más tierra al suelo y moldearla alrededor de las plantas. Debe agregar tierra de dos a tres veces durante la temporada de crecimiento. Debido a que las papas son parte del tallo de la planta, no de la raíz, cuanto más “tallo” mantenga bajo tierra, más papas crecerán y mejor será la cosecha.3

Las papas, que tienen gran contenido de fibra, vitaminas B y C, y minerales como el potasio, son fáciles de cultivar a principios de la primavera y, dependiendo de las condiciones ambientales, tardan entre 85 y 100 días en madurar.

Una vez que coseche las papas, es muy importante almacenarlas de forma adecuada, sueltas (no en plástico), en un lugar oscuro y seco a una temperatura de entre 50 y 60 grados °F. (10 y 15 grados °C). Aunque a las papas les gusta un ambiente oscuro y fresco, no se deben refrigerar, ya que podrían echarse a perder.

Ejotes: contienen una gran cantidad de vitaminas A, C y K, manganeso, fibra y folato. Además, son fáciles de almacenar y se pueden enlatar junto con las patatas o, incluso, fermentar.

Los ejotes también se pueden cocinar y congelar hasta por un año. Hoss Tools recomienda la variedad Momentum Bush Bean,4 que según ellos es la variedad de leguminosas arbustivas más productiva que existe, con rendimientos elevados, cosechas concentradas y tolerancia alta al estrés.

Lo ideal es plantarlos en primavera después de la última helada, ya que la germinación sucede cuando la temperatura del suelo es de 65 grados °F (18 °C) o más (con una temperatura de germinación óptima de 77 grados °F (25 °C)).

Puede plantar las semillas al aire libre cada dos semanas en la primavera y a principios del verano, para tener una producción durante la temporada de crecimiento.

Plántelas en cuanto comience la primavera, ya que las plantas dejarán de florecer o de producir durante las temperaturas altas del verano. Las leguminosas arbustivas se pueden cosechar tres o cuatro veces durante la temporada, y también puede plantarlas en hileras dobles para ahorrar espacio y aumentar la cosecha.

Para hacer esto, haga dos filas con un espacio de 6 pulgadas (15 cm) de distancia entre cada una, con las filas dobles espaciadas a 3 pies (91 cm) de distancia.5

Si tiene acceso a riego por goteo o a una manguera de remojo, puede usarla para regar ambas hileras a la vez. También se pueden plantar en grandes cantidades. Hoss Tools recomienda “apilar las plantas en grupos grandes” para asegurarse de tener suficientes ejotes para los meses más fríos.

Cebollas Heirloom: son una fuente alimenticia muy sostenible. En el pasado, los agricultores que cultivaban este tipo de cebollas salían al campo y las desenterraban cada vez que las necesitaban, luego desenterraban los bulbos y los almacenaban como las cebollas regulares para volverlas a plantar el año siguiente.

Según la variedad, las cebollas no sólo son fáciles de almacenar y conservar durante dos meses o más después de la cosecha, sino que también tendrá su propia reserva de semillas que podrá reutilizar y compartir con sus vecinos. Además, las cebollas, que tienen una gran cantidad de vitamina C, compuestos sulfúricos, flavonoides y otros fitoquímicos, son muy saludables.

Zanahorias: al igual que con la mayoría de los vegetales que cosecha en casa, el sabor de una zanahoria comprada no se compara con el de una cosechada por usted mismo. Además, las zanahorias son un vegetal muy valioso en tiempos difíciles, ya que pueden guardarse en el refrigerador durante dos o tres semanas, o cocinarlas y congelarlas para durar más tiempo.

También se pueden enlatar y fermentar, lo que las convierte en un vegetal versátil para uso a largo plazo.

Al igual que con los ejotes, las zanahorias pueden cultivarse en hileras dobles con riego en el medio. Plante hileras a 6 pulgadas (15 cm) de distancia cada 3 pies (91 cm). Hoss Tools recomienda sembrar las zanahorias en carriles gruesos, así tendrá un “bosque denso de zanahorias” y obtendrá una producción mayor en poco espacio.

Aunque al cultivarse de esta manera es posible que las zanahorias crezcan de diferentes tamaños (algunas serán más pequeñas y otras más grandes), todas tendrán un excelente sabor. Las zanahorias deben sembrarse al aire libre, ya que no se trasplantan bien, y crecen mejor cuando se plantan en temperaturas más frías a principios de la primavera o del otoño.

Las zanahorias, que son ricas en betacaroteno, tardan más tiempo en germinar que la mayoría de los otros cultivos, asimismo, necesitará mantener la tierra húmeda durante al menos siete días para que puedan germinar. La temperatura ideal del suelo es de alrededor 75 grados °F (24 °C).

Si vive en el sur de Estados Unidos, puede cultivar dos cosechas de zanahorias al año. Puede sembrar en otoño, para permitir que el cultivo pase el invierno y poder cosechar en la primavera. Considerando que aún no hace demasiado calor, las zanahorias se mantendrán bien en la tierra, lo que le permitirá cosecharlas cuando las necesite. Luego, puede plantar otro cultivo a principios de la primavera, el cual estará listo para cosecharse a finales de primavera o principios de verano.

Calabaza de invierno: es otro excelente alimento para almacenar. Aunque se llaman calabazas de “invierno”, se cultivan durante la época cálida del año, pero pueden almacenarse sin refrigerar para usarlas durante el invierno. Por lo regular, entre más dulce es la variedad, menos tiempo se pueden conservar.

La kabocha, una calabaza de invierno con una pulpa cremosa que se utiliza para hacer sopas, puede almacenarse hasta por tres meses, mientras que la calabaza butternut y la calabaza bellota pueden durar hasta seis meses. La calabaza sweet dumpling, que es una de las calabazas de invierno más dulces, puede almacenarse hasta por 45 días.

La calabaza de invierno es una fuente excelente de vitaminas K1, A, C y E, así como de vitamina B, calcio y magnesio. El tiempo de almacenamiento es fundamental, ya que la calabaza de invierno produce una cosecha al final de la temporada de crecimiento, lo que le brinda alimento para todo el invierno.

Okra: es un cultivo de clima cálido que produce vainas que miden de 2 a 3 pulgadas (5 a 7 cm) de largo, que crecen en una planta grande, frondosa y perenne con flores similares al hibisco. La okra, la cual tiene una gran cantidad de fibra, también contiene vitamina K, manganeso, folato y vitamina C, así como grandes cantidades de flavonoides y antioxidantes.

Es un cultivo de crisis muy importante, ya que es de alta producción y se puede producir durante mucho tiempo. Las plantas pueden comenzar a producir vainas cuando miden entre 1 y 2 pies (30 y 60 cm) de altura, y continuarán produciendo, ya que pueden crecen hasta 6 pies (180 cm) de altura.6 Sin embargo, puede cortarle la parte superior cuando alcance 4 pies (120 cm) de altura y volverlas a plantar hasta 3 veces al año.

Hoss Tools sugiere plantar okra, en especial la variedad jambalaya, en primavera y una vez más a mediados del verano y principios del otoño, ya que crecerá hasta antes de la primera helada. Debido a los nematodos, que son pequeños gusanos que actúan como parásitos de las plantas, es importante alternar el lugar donde planta la okra y volver a plantar en el mismo lugar cada tres años.

Sin embargo, una vez plantada, la okra es un alimento abundante y versátil que se puede congelar, enlatar o encurtir. Es una fuente alimenticia básica en el sur del país y, aunque es necesario regarla de forma constante para obtener una mayor productividad, es algo resistente a la sequía y crecerá bien en condiciones muy cálidas y secas.

 Cómo hacer su propio ‘jardín para la crisis’

Durante la Segunda Guerra Mundial, una época en la que la escasez de alimentos era inevitable, los jardines para la crisis se volvieron tan productivos que suministraban alrededor del 40 % de los vegetales frescos en Estados Unidos.7 En la actualidad, estos jardines son muy comunes y, si bien, siempre es un buen momento para cultivar sus propios alimentos, si ha pensado hacer uno, ahora es el momento perfecto para comenzar.

Además de brindarle vegetales frescos sin necesidad de ir al supermercado, la jardinería es una forma sencilla de reducir el estrés, otro beneficio fundamental en tiempos de crisis.

Un estudio en la revista Preventive Medicine Reports también concluyó que “realizar jardinería de forma regular podría mejorar la salud pública”, también indicó que la jardinería podría tener una relación con niveles menores de depresión y ansiedad, con una mejor satisfacción y calidad de vida, y con un sentido de comunidad.8 En adultos mayores, la jardinería podría tener un vínculo con lo siguiente:9

  • Sentimientos de logro
  • Bienestar y paz
  • Un descenso en los síntomas de depresión
  • Un efecto protector sobre las funciones cognitivas
  • El desarrollo de los vínculos sociales

Además de los vegetales mencionados, que son ideales por su gran productividad y potencial de almacenamiento prolongado, otras hortalizas comunes son los tomates, los pimientos dulces y picantes, los pepinos, los tirabeques, las espinacas, la lechuga y las acelgas, los cuales son fáciles de cultivar.

Recuerde que lo más importante para poder cultivar alimentos nutritivos es tener un suelo sano. Para desarrollar un suelo sano es necesario diversificar sus plantas. Evitar labrar y cubrir la superficie con cultivos de cobertura o mantillo también es importante. Incluso, comenzar con uno o dos vegetales le brindará una fuente de alimento muy importante, lo que aumentará su tranquilidad alimenticia y le brindará un pasatiempo del que podrá estar orgulloso.

Fuentes y Referencias