Por Alejandro Dungla, Fundación Tortilla, 17 de mayo de 2021.
El encalamiento del suelo, es decir, la adición de carbonatos de calcio y de magnesio e hidróxido de calcio a la tierra de cultivo, forma parte de las buenas prácticas agrícolas porque este procedimiento permite balancear el pH del suelo para tener cosechas productivas.
“Los fertilizantes son un acidificante del suelo, sin embargo, son necesarios para que las plantas tengan nitrógeno y demás componentes que las nutren y puedan producir una buena cosecha”, explica Efraín Parra, gerente comercial para industria química y alimentos de Calidra.
Los fertilizantes son ácidos porque éste es el medio necesario para que los componentes que nutren a la planta sean solubles y puedan ser aprovechados. Sin embargo, una vez producido su efecto fertilizante, la acidez se queda como un residuo en el suelo: es ahí donde la cal juega un papel importante debido a su alcalinidad.
“Lo primero que hay que hacer para saber si un suelo necesita encalamiento es medir su acidez. Las plantas crecen adecuadamente entre un pH de 6 a 8, pero si está a menos de 5, tu tierra está ‘tronada’ y necesitas a fuerza un encalamiento”, explica el experto.
La cal agrícola es una cal fabricada específicamente para el encalamiento de suelos; con este procedimiento se reducen los costos de producción porque se necesita menos fertilizante debido a que, con el pH del terreno corregido y balanceado, las plantas absorberán de manera más adecuada los nutrientes, además de que la cal aportará calcio y magnesio al suelo, elementos claves para el desarrollo de las plantas.
“Nosotros en Calidra podemos asesorar gratuitamente a los productores que lo necesiten con un análisis básico de la acidez del suelo para poder determinar si es necesario encalar o no. Es muy sencillo: se mezcla una muestra del suelo con agua destilada, que es pura, para descubrir el pH. El aparato que mide la acidez se llama potenciómetro y el análisis se hace delante del propietario o del encargado del terreno”, comenta Efraín.
“El encalamiento es una buena inversión para tu terreno, ya que con este procedimiento las plantas aprovecharán los nutrientes del suelo y los fertilizantes añadidos de una manera más optima; se puede subir el rendimiento hasta un 40%”, concluye el especialista de Calidra.
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