Por Lucía Castillo, MSN Noticias, 10 de junio de 2021.

“Si bien ningún alimento ni suplemento dietético puede por sí solo prevenir ni curar la COVID-19”,  expertos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Comisión Nacional de Biodiversidad (Conabio), sostienen que una nutrición adecuada  puede reducir la probabilidad de padecer enfermedades que incrementan la posibilidad de enfermar gravemente o morir de COVID-19, como la diabetes y la obesidad.

A través de la guía de alimentación saludable “Sobreviviendo a la COVID-19 en México: el remedio olvidado”, los investigadores explican que lo que se come y bebe puede afectar  la capacidad del organismo para prevenir y combatir las infecciones y recuperarse de ellas.

Y  cómo es posible mantener una buena salud gracias al uso y consumo de alimentos tradicionales de la dieta mexicana de origen natural como son el chile, el maíz, el jitomate cacao, nueces, tomates, etcétera, debido a que estos reúnen vitaminas, minerales, fibra dietética y proteínas necesarias para el buen funcionamiento del cuerpo.

¿Cómo una buena dieta ayuda contra el COVID-19?

De acuerdo con los expertos, tener una dieta nutritiva en tiempos de COVID-19 ayuda a:

  • En caso de ser contagiado, hay menos posibilidad de enfermarse gravemente.
  • Es menos probable el desarrollo de condiciones como diabetes que vuelven mortal a la COVID-19.
  • Una dieta sana puede ayudar a al cuerpo en su recuperación.

Esto se debe a que aunque hay múltiples factores que pueden incrementar el riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes y enfermedades pulmonares, la evidencia muestra que la dieta juega un papel importante en bajar ese riesgo.

“De acuerdo con muchos estudios una dieta basada en el alto consumo de plantas ayuda a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares”, dice la guía.

La cual además indica que las frutas, verduras, granos, legumbres, nueces y semillas oleaginosas están cargadas de nutrientes como betacarotenos, vitamina C, vitamina E, proteína y zinc; y complementadas por pequeñas cantidades de huevo, leche, carne o pescado, pueden estimular el sistema inmune y ayudar al cuerpo a combatir a la COVID-19.

Mientras que las azúcares, almidones refinados y grasas no son saludables y pueden causar o empeorar los padecimientos.

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