Por Redacción, Contralínea, 20 de junio del 2020.

Por medio de un comunicado, respaldado por el Congreso Nacional Indígena, los ejidatarios también se deslindan de los hechos de violencia de este viernes 19 en que perdió la vida el empresario Andrés Arreola.

Los campesinos solicitan las medidas como “defensores del territorio de nuestro pueblo ante la creciente situación de invasiones, delitos ambientales, despojos e impunidad en la zona”.

De acuerdo con el documento, los ejidatarios de San Nicolás Totolapan sembraban avena en una parcela ubicada en el paraje El Cofre, en las inmediaciones del kilómetro 12 de la carretera Picacho-Ajusco. Ahí llegaron Arreola y otros integrantes del Ejido Héroes de 1910, con quienes mantuvieron un diálogo ríspido por los límites ejidales.

Los campesinos explican que, cuando habían terminado de dialogar y los ejidatarios de San Nicolás Totolapan se reincorporaban a las labores de siembra, un individuo ajeno a la comunidad se acercó al empresario y lo asesinó con un arma de grueso calibre.

“Algunos integrantes del grupo de ejidatarios intentamos detener a esta persona quien se interno? en la zona boscosa del lugar, sin embargo ante el hecho de estar armado detuvimos el intento.”

Pidieron auxilio a los elementos de la policía que se encontraban en el sitio, gracias a que se ha instalado un retén de la Secretaría de Seguridad Pública en el lugar. “Los oficiales iniciaron la persecución de este individuo e intercambiaron disparos”. Ante el riesgo en se que se encontraban, los campesinos decidieron retirarse.

“Lamentamos profundamente los hechos de violencia, desconocemos su origen y manifestamos nuestra preocupación por la seguridad de los miembros de nuestro pueblo, particularmente del grupo de productores que hemos estado en la defensa de los límites del ejido de San Nicolás Totolapan.”

Con negocios conocidos en el ámbito de la farándula, Arreola y los hermanos Saúl y Felipe Camarillo Gutiérrez comenzaron a disputar tierras comunales de tres poblaciones de la región: San Andrés Totoltepec, San Miguel Ajusco y San Nicolás Totolapan. Sin antecedentes en la zona, se integraron a un supuesto “Ejido Héroes de 1910” para ocupar terrenos, talar árboles y construir en áreas de protección ecológica.

En un video que circuló entre sus redes sociales hace un año, Arreola dijo que proyectaba construir en los terrenos invadidos “el mejor lugar de la Ciudad de México, para cazar y ya no se tengan que ir a Oaxaca, a Cuernavaca, a Valle de Bravo”.

Por su parte, el Congreso Nacional Indígena llama “a estar atentos a la seguridad e integridad física de los compañeros organizados del Pueblo de San Nicolás Totolapan. Recordemos que los malos gobiernos operan a través de sicarios para imponer el despojo y después se valen de sus leyes para reprimir y encarcelar a quienes se oponen a éste”.

Los campesinos temen que se les busque vincular con hechos ajenos a su comunidad y a sus actividades pacíficas de resistencia.

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