Por La Vía Campesina, 11 de junio de 2019

Movimientos populares, campesinos y sindicales, investigadores, ONGs, ambientalistas, parlamentarios y gobiernos progresistas firman el documento. El compromiso con la soberanía popular, los territorios de los pueblos y los intereses de la nación brasileña es central para la articulación.

A continuación, la carta completa:

CARTA TIERRA, TERRITORIO, DIVERSIDAD Y LUCHAS

Al pueblo brasileño,

Nosotros, movimientos populares y sindicales del campo, de las aguas y de las selvas, trabajadores y trabajadoras rurales, investigadores e investigadoras, organizaciones no gubernamentales, ambientalistas, representantes de gobiernos progresistas, líderes partidistas y parlamentarios, reunidos entre los días 06 y 08 de junio de 2019 en la Escuela Nacional Florestan Fernandes (Guararema, São Paulo), considerando los actuales desafíos, denunciamos que:

  1. Estamos en un momento de crisis del capitalismo, lo que resulta en el aumento de las desigualdades, injusticias, exclusiones y violencia contra los pueblos. La furia insana del capital en su búsqueda por mantenerse, profundiza la explotación y aumenta el desempleo, expolia los recursos públicos y los bienes de la naturaleza;
  2. El capital expolia ilegítima y ilegalmente las tierras, el agua, la biodiversidad, los minerales, el petróleo y otras fuentes de energía, lo que resulta inclusive en crímenes socioambientales como los crímenes cometidos por la minera Vale en Mariana y Brumadinho(Minas Gerais);
  3. Para implementar una agenda ultraliberal, el capital financiero, vendepatrias y antinacional, impidieron a Lula da Silva participar en las elecciones y actuaron para elegir a Jair Bolsonaro, manipulando la voluntad popular por diversos medios, especialmente a través de la difusión de noticias falsas (fake news) y con la campaña del odio. Los intereses antinacionales, privatizadores y en favor de Estados Unidos fueron evidenciados en la entrega de la Base de Alcántara, de la Embraer, del pre sal, de la Amazonia, y en las amenazas de vender el Banco de Brasil, los Correos, la Caixa Econômica Federal, subsidiárias de Petrobras, entre otras empresas públicas;
  4. Las principales consecuencias de la agenda ultraliberal son: aumento del desempleo, disminución de los salarios, desmantelamiento de derechos laborales, precarización laboral, aumento del trabajo esclavo, recorte de políticas de protección social y de renta mínima como el Bolsa Família, la suspensión de los programas de vivienda, de defensa de los derechos de las mujeres y de la juventud, los recortes en la educación pública y un brutal ataque a la seguridad social;
  5. Para atender a los intereses del agronegocio, los gobiernos de Michel Temer y de Jair Bolsonaro promovieron el desmantelamiento de las instituciones y de la legislación de derechos humanos, ambiental, fundiaria y de soberanía y seguridad alimentaria, como el fin del Ministerio de Desarrollo Ambiental, Ministerios de Trabajo, de la Cultura, la reformulación de la Secretaría de Acuicultura y Pesca, el desmantelamiento del INCRA, FUNAI, IBAMA, ICMBio, Fundación Palmares y la extinción de los consejos de participación social, como el CONSEA, CONDRAF, Comisión Nacional de Agroecología y Producción Orgánica y el Consejo Nacional de Pueblos y Comunidades Tradicionales;
  6. Esto resulta en el aumento de la deforestación, del ritmo de explotación de los recursos naturales, de la concesión y uso de agrotóxicos, de la violencia hacia las mujeres (aumento del feminicidio) y hacia personas LGBT, del genocidio de la juventud negra y de la violencia en el campo. A la vez, resulta también en el desmantelamiento de proyectos de reforma agraria, de demarcación de tierras ancestrales, de formalización de títulos de territorios quilombolas [comunidades ancestrales afrodescendientes], reconocimiento de tierras ocupadas, en la reconcentración de la tierra, legalización de la utilización de documentos falsos para forjar la titularidad y reivindicar la tenencia de tierras, disminución o recategorización de zonas de protección, lo que debilita el sistema de protección ambiental, desmantelamiento de los derechos de pescadoras y pescadores artesanales, además de la destrucción de políticas públicas destinadas a los pueblos del campo, de las aguas y de las selvas.

Los participantes del seminario reafirman su lucha:

  1. a) En defensa de las políticas agrarias del Estado, para el cumplimiento de la Constitución Federal: la desapropiación para fines de reforma agraria de las tierras que no cumplen su función socio ambiental, la demarcación de tierras indígenas, la formalización de títulos de territorios quilombolas y el reconocimiento de tierras tradicionalmente ocupadas;
  2. b) En defensa de las políticas socioambientales, igualmente garantizadas por la Constitución: el derecho a un medio ambiente ecológicamente equilibrado y de uso común del pueblo, esencial a la calidad de vida;
  3. c) Por la manutención y ampliación de las unidades de preservación para garantizar los derechos de los pueblos y de las comunidades tradicionales;
  4. d) En defensa de los territorios, de la tierra, del agua, semillas, bienes naturales, cultura, modos de vida y del buen vivir.
  5. e) Por la soberanía alimentaria, soberanía hídrica, territorial, ambiental, genética, energética y mineral; soberanía alimentaria, hídrica, territorial, ambiental, genética, energética e mineral;
  6. f) Por el derecho al trabajo decente, salario, ingresos, empleo, ingreso ciudadano, contra la precarización del trabajo y el trabajo esclavo;
  7. g) Contra la reforma de las Pensiones, que ataca especialmente a las mujeres, a los asalariados y asalariadas rurales; asegurados en regímenes especiales y docentes. Defendemos la manutención del sistema de seguridad social pública, con carácter solidario y el derecho a la jubilación;
  8. h) En defensa de la educación pública, gratuita y de calidad en todos los niveles, para toda la población brasileña, donde se destaca la importancia de la educación y de las escuelas en el campo;
  9. i) Contra los retrocesos en las políticas públicas conquistadas por la clase obrera y por los pueblos del campo, de las aguas y de las selvas;
  10. j) Contra la violación de los derechos humanos, la violencia, la flexibilización de la portación de armas, contra el racismo, el machismo, la predicación del odio y todas las formas de discriminación;
  11. k) En defensa del Sistema Único de Salud (SUS), por la salud pública, gratuita y de calidad;

Ante esto, afirmamos nuestro compromiso:

  1. a) Con la soberanía popular, los territorios de los pueblos y los intereses de la nación brasileña , nos sumamos al conjunto de la clase obrera en la defensa de las empresas estatales, de los servicios públicos como un derecho de todos y no una mercancía, contra la sumisión del gobierno de Bolsonaro a los intereses estadounidenses;
  2. b) A denunciar la selectividad, falta de transparencia y de participación social en el sistema de justicia y la parcialidad de sectores del Poder Judicial que resultan en violaciones de derechos e impunidad;
  3. c) A construir un nuevo proyecto para el campo, centrado en sus sujetos – en especial las mujeres, los jóvenes y los negros –, tierra y territorios, educación, soberanía alimentaria, cooperación y agroecología;
  4. d) A producir alimentos sanos a precios justos para el pueblo brasileño;
  5. e) Con la preservación de la naturaleza y contra el acaparamiento y contra la expoliación depredatoria del agro-hidro-minero-negocio, denunciando los retrocesos ambientales y resistiendo a una economía devastadora;
  6. f) A defender a nuestros compañeros, compañeras y organizaciones sufren con la criminalización y violencia, denunciando todas las injusticias en todo el país;
  7. g) Por la libertad de Lula como expresión de respeto a los derechos constitucionales y democráticos de todas las personas.

Reafirmamos la lucha unitaria por la construcción de una sociedad justa, igualitaria y democrática. Convocamos al pueblo brasileño a resistir y a luchar participando de las masivas movilizaciones populares, de la Huelga General el 14 de junio y de la Marcha de las Margaritas entre los días 13 y 14 de agosto.

São Paulo, 8 de junio de 2019

Firman la nota:

Articulação dos Empregados Rurais do Estado de Minas Gerais – ADERE

Articulação no Semiárido Brasileiro – ASA

Articulação Nacional de Agroecologia – ANA

Articulação Nacional de Agroecologia da Amazônia

Associação Brasileira de Agroecologia – ABA

Associação Brasileira de Juristas pela Democracia – ABJD

Associação Brasileira pela Reforma Agrária – ABRA

Campanha Permanente Contra os Agrotóxicos e Pela Vida

Central Única dos Trabalhadores – CUT

Central UNIcatadores

Comissão Pastoral da Terra – CPT

Confederação Nacional dos trabalhadores rurais Agricultores e Agricultoras Familiares – CONTAG

Confederação Nacional dos Trabalhadores e Trabalhadoras na Agricultura Familiar – CONTRAF

Conselho Indigenista Missionário – CIMI

Conselho Nacional de Povos e Comunidades Tradicionais – CNPCT

Coordenação Nacional de Articulação das Comunidades Negras Rurais Quilombolas – CONAQ

Escola de Ativismo

Federação de Órgãos para Assistência Social e Educacional – FASE

Fórum dos Gestores e Gestoras Responsáveis pelas Políticas de Apoio à Agricultura Familiar do Nordeste

Fundação Lauro Campos e Marielle Franco

Fundação Perseu Abramo

Grupo Carta de Belém – GCB

Movimento Camponês Popular – MCP

Movimento Ciência Cidadã

Movimento Interestadual de Mulheres Quebradeiras de Coco Babaçú – MICQB

Movimento dos Atingidos por Barragens – MAB

Movimento de Pescadores e Pescadora Artesanais – MPP

Movimento de Trabalhadores e Trabalhadoras do Campo – MTC

Movimento dos Pequenos Agricultores – MPA

Movimento dos Trabalhadores Rurais Sem Terra – MST

Movimento pela Soberania Popular na Mineração – MAM

Movimento Nacional de Direitos Humanos – MNDH

Movimento por Trabalho e Direitos – MTD

Slow Food Brasil

Pastoral da Juventude Rural – PJR

Projeto Brasil Popular

Terra de Direitos

União Nacional das Organizações Cooperativas Solidárias – UNICOPAS

Artículo por: Juca Guimarães de Brasil de Fato

Traducción: Luiza Mançano