Por 90 grados, 3 de julio de 2019
Al uso inadecuado de agroquímicos y la deficiente disposición final de los envases de pesticidas, atribuyen ganaderos de Buenavista la muerte de semovientes que pudieron haber ingerido agua contaminada en alguna área donde se tiraron frascos de herbicidas e insecticidas que se destinan para la fumigación de cultivos.
En torno a la publicación de la muerte de cabezas de ganado por envenenamiento, comentaron que fue por esta causa y a pesar de que en repetidas ocasiones se ha capacitado a los productores para la disposición final, lamentablemente los botes se tiran y este puede ser el resultado.
“Fue una vaca muerta, no una tempestad” comentaron los ganaderos cuestionados en torno al tema de la muerte de semovientes que se reportó en aquel municipio.
Por otro lado en torno a este tema pero en Apatzingán, ganaderos como el ex líder de la Asociación Ganadera Local de Apatzingán, Russell Torres Ortiz comento, que el problema que ellos han venido enfrentando desde hace años es la contaminación del canal Murataya, que es un foco de contaminación de desechos químicos de la industrias de limón y donde descargan aguas negras de Apatzingán y debido a esto son dañinas para el ganado pues cuando las vacas preñadas la beben es altamente abortiva, además de que afecta la tierra, pues ya no puede cultivarse en estas áreas.
De ahí que insistieron en que la SEMARNAT tome cartas en el asunto y retome el tema que data de hace varias décadas para que las industrias tengan adecuada disposición de los residuos para evitar la contaminación de canales y áreas de cultivo.
