Por La Jornada, 25 de julio de 2018

Al menos 207 defensores de la tierra y del medio ambiente fueron asesinados el año pasado, indica el informe ¿A qué precio?, elaborado por la organizacion internacional no gubernamental (ONG) Global Witness, con sede en Londres.

La mayoría de víctimas fueron “personas comunes y corrientes, ultimadas por defender sus bosques, ríos y hogares contra las industrias destructivas”, señala el estudio publicado este martes y difundido en diversos países.

Entre los motivos por los que murieron se menciona la manifestación contra la agricultura a gran escala, en particular contra extensas plantaciones de palma aceitera, café, frutas tropicales, caña de azúcar y la ganadería, así como la oposición a las operaciones mineras y petroleras, la caza ilegal y la tala.

La organización documentó asesinatos en 22 países de todo el mundo, calificando como región más peligrosa para los defensores de la tierra y del medio ambiente los países de América Latina, a los que corresponde 60 por ciento de todos los fallecidos.Dar la vida por la Amazonia

De acuerdo con los datos de Global Witness, “Brasil registró la mayor cantidad de asesinatos que cualquier otro país, con 57 personas asesinadas, 80 por ciento de las cuales murieron mientras protegían las riquezas naturales del Amazonas”.

Un total de 24 defensores fueron asesinados debido a los conflictos por la tierra en Colombia.

En México y Perú los homicidios aumentaron de tres a 15 y de dos a ocho, respectivamente, mientras “Nicaragua registró la mayor cantidad de homicidios per cápita, con cuatro activistas medioambentales asesinados”.

En Honduras fueron documentados sólo cinco asesinatos en comparación con los 14 registrados en 2016. El informe señala, además, que “los asesinatos de estas personas defensoras rara vez dan lugar a procesos judiciales, lo que dificulta saber quién los llevó a cabo o los ordenó”.

Brasil es el país con más activistas medioambientales asesinados durante 2017 en 22 países, según el estudio de Global Witness. “Los datos indican que el año anterior, 57 activistas fueron asesinados, 25 de ellos durante ataques.

“En vez de tomar medidas para prevenir estas atrocidades, el presidente Michael Temer ha suavizado las leyes y ha debilitado las instituciones destinadas a protegerles”, aseguró la ONG británica.Agronegocio, sector riesgoso

El reporte informa que en los países estudiados, el sector del agronegocio se situaría como el más peligroso, seguido del sector minero. Después de Brasil, los países con más muertes son Filipinas (48), Colombia (24) y México (15).

Según Global Witness, los activistas de la ecología se encuentran en la primera línea del campo de batalla para defender intereses comunes a toda la humanidad: sostenibilidad, biodiversidad, justicia y preservación de los derechos humanos.

La ONG responsabiliza a los distintos gobiernos por las muertes, al afirmar que han fallado en su actuación “responsable, ética y legal”, e invita a los consumidores a demandar de las empresas que éstas no abusen de los derechos humanos en la producción de bienes, que no destruyan la cultura o actúen en pro de la devastación medioambiental