Por Angélica Enciso L., La Jornada, 23 de mayo de 2018

Alrededor de 2 mil especies han desaparecido del planeta y hay 17 mil 291 en riesgo. Sólo en México se han perdido varios tipos de peces de agua dulce, aves y algunos mamíferos, como el oso pardo; otras como la vaquita marina están en inminente riesgo de extinción.

En el Día Mundial de la Diversidad Biológica, que se celebró ayer, el Programa de las Naciones Unidas para el Ambiente (Unep) informó que 70 por ciento de las personas pobres del mundo viven en zonas rurales y dependen en forma directa de la biodiversidad para sobrevivir, pero la variedad y abundancia de especies han disminuido en 40 por ciento entre 1970 y 2000.

Según la Comisión Nacional para el Uso y Conocimiento de la Biodiversidad (Conabio), entre las especies mexicanas que se han extinguido hay peces de agua dulce como los cachorritos de Potosí y de Trinidad, en Nuevo León; la paloma de Isla Socorro y el paíño de Isla Guadalupe; mamíferos como la foca monje del Caribe, el oso pardo y el lobo mexicano –actualmente en proceso de recuperación– del centro y norte de México.

En la norma oficial 059 de la Semarnat están enlistadas 2 mil 600 especies bajo algún tipo de riesgo, ya sea que estén enresguardo especial, amenazadas o en riesgo de extinción. En esa lista hay vegetación (menciona cuatro tipos de manglar), mamíferos como el jaguar, además de peces, reptiles y aves.

Entre las causas de la pérdida de biodiversidad están el deterioro y la desaparición de hábitat, pues se transforman selvas, bosques, matorrales, pastizales, manglares, lagunas y arrecifes en campos agrícolas, ganaderos, granjas camaroneras, presas, carreteras y zonas urbanas donde destruimos el hábitat de miles de especies, señala la Conabio.

Según estimaciones recientes en México se ha perdido alrededor de 50 por ciento de los ecosistemas naturales, señala. Las principales transformaciones se han hecho en las selvas húmedas y secas, los pastizales, los bosques nublados y los manglares y en menor grado en matorrales y bosques templados.

Los ecosistemas más accesibles, productivos, con mejores suelos y en lugares planos han sido los más transformados. Los principales remanentes se encuentran en lugares poco accesibles o poco productivos.

El Unep señala que el consumo insostenible sigue y la demanda de recursos en todo el mundo excede la capacidad biológica de la tierra en 20 por ciento. Destaca que a la fecha se han identificado unas 1.75 millones de especies, la mayoría pequeñas, como los insectos.

Explica que la diversidad biológica es la amplia variedad de plantas, animales y microrganismos que habitan el planeta, así como las diferencias genéticas dentro de cada especie y la variedad de ecosistemas, como los que hay en los desiertos, los bosques, los humedales, las montañas, los lagos, los ríos y los paisajes agrícolas.