Por Red Boca de Polen, 29 de marzo de 2018
Un conjunto de organizaciones han lanzado la campaña Yo Quiero Mi Tortilla 100% Nixtamalizada busca informar a los consumidores a la hora tomar decisiones que beneficien tanto su salud, como a quienes producen tortillas nixtamalizadas y dejen de consumir industrializadas
El maíz es considerado el símbolo de la alimentación mexicana, siendo su máxima expresión la tortilla nixtamalizada, producto base de la dieta mexicana.
Sobre esta campaña nos habló Francia Gutiérrez, integrante de la Asociación de Consumidores Orgánicos y señaló que en “México se consume 120 kilogramos por ciudadano y ciudadana, cerca de 8 tortillas diarias en el caso de adultos y dos tortillas diarias en la infancia”.
Agregó la portavoz de la campaña, que la tortilla ha tenido múltiples transformaciones en los últimos 30 años frente al nacimiento de harinas que se promueven como nixtamalizadas, productos comercializados principalmente bajo las marcas MASECA y MINSA, y que cada vez tienes mayor participación en la decisión de consumo de los mexicanos sin que se garantice calidad y suficiencia, además de la falta de identidad cultural que comparte una tortilla elaborada con maíces nativos.
En esta campaña, la Asociación de Consumidores Orgánicos asegura que: “Así como el maíz, también tenemos una diversidad de tortillas, en contraste con la tortilla industrializada que tiene estándares que garantizan el procedimiento mas no el origen del maíz, y no garantizan tampoco, tal como lo había dicho la Unión de Científicos Comprometidos con la Sociedad (UCSS) a través de una investigación encabezada por la Dra. Elena Álvarez Buylla, que estas tortillas sean sanas puesto que salió el resultado de que el 90.4 % de las tortillas y productos derivados de maíz industrializado contienen trazas de agroquímicos como el glifosato y tienen presencia de transgénes y que la acción de la defensa de la tortilla 100 % nixtamalizada es una acción positiva encaminada a la exigencia del Derecho a la Alimentación.
Si bien se reconoce el Derecho a la Alimentación desde el año 2011, no existe aún una ley que la haga cumplir, bajo este argumento, no hay duda de que la tortilla debe ser defendida con mecanismos generados por las instancias correspondientes, pruebas científicas, solicitudes de información, agregó Francia Gutiérrez.
Recientemente se dio a conocer por la organización Tortilla de Maíz Mexicana, que el consumo de tortilla en México está disminuyendo y en Estado Unidos va en aumento, incluso más que el pan, no solo por el consumo de los latinos sino por ciudadanos de origen, por ello esta campaña es binacional “(ante este hecho), estamos tratando de generar otro tipo de relación entre estas dos naciones sobe todo porque hay mucha contradicción en que Estados Unidos es el principal productor de maíz transgénico y es lo que estamos consumiendo en nuestro país. Tenemos el apoyo de organizaciones como Yo Soy Maíz en los Ángeles California, en San José California La Defensa del Maíz, en Washington está Acequia Institute un productor de maíz orgánico en Colorado y muchas de las comunidades mexicanas jornaleras en aquel país siguen llevando a partir de su migración el fomento de consumo de la tortilla”.
En México, se han sumado a esta iniciativa organizaciones como Centro de Orientación Alimentaria (COA), la Campaña Sin Maíz No Hay País, Semillas de Vida, Tortillería Tamoa, Cintli, Tortillería Orgánica, la Campaña Tortilla de Maíz Mexicana, el Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, entre otras.
La campaña Yo Quiero Mi Tortilla 100% Nixtamalizada, estará realizando una serie de foros, que inician en la segunda semana de mayo en la Ciudad de México y recorrerá otros estados de la República.
Conoce más sobre el proyecto en la página www./consumidoresorganicos.org/
