Por Kara Castillo, E-Consulta, 10 de enero de 2017

La batalla legal contra la siembra de maíz transgénico está a punto de resolverse en definitiva con la decisión de cuatro impugnaciones que promovieron las corporaciones transnacionales contra la sentencia de amparo que ganó un grupo de investigadores y defensores de derechos humanos.

El amparo promovido por el grupo consiguió que por mandato judicial se suspendiera la siembra de maíz transgénico en todo el país desde septiembre de 2013 a la fecha.

El abogado del grupo, René Sánchez Galindo, que el mejor escenario posible es que la autoridad judicial federal declare que la liberación o siembra de maíces transgénicos dañará el derecho humano a la diversidad biológica de los maíces nativos, de las generaciones actuales y futuras; así como los derechos relacionados: derecho a la alimentación, derecho a la salud y derechos de los pueblos originarios.

Dijo que en el proceso se han propuesto  cuatro pruebas periciales, con sus respectivas audiencias de interrogatorios verbales. La materia de los peritajes son las afectaciones que se causarían con la siembra de maíz transgénico en México. Solo el grupo propuso peritajes; la industria demandada, al igual que el gobierno, presentaron solo documentos.

El peor escenario- dijo también Sánchez Galindo-  es que la misma autoridad judicial haga válida la carta de premiados con el Nobel, que carece de firmas. “Se refiere a la biotecnología en general, ese tema ha desviado la atención lo que mantenemos en foco en el  juicio colectivo es el debate judicial se centra exclusivamente en la siembra de maíz transgénico en su país de origen”.

Los científicos con el premio Nobel se refieren al arroz transgénico en África, cuestión irrelevante para la demanda colectiva, dijo el abogado.

Y aunque Sánchez Galindo solicitó al Juzgado la oportunidad de interrogar en audiencia a los premios Nobel, el juez se opuso así como a todos los interrogatorios verbales propuestos y el juicio quedó suspendido hasta la resolución del recurso.