Por La Jornada, 22 de febrero de 2018
Los agricultores franceses condujeron ayer sus tractores por algunos centros urbanos y bloquearon carreteras en rechazo al aumento de las importaciones agrícolas desde Sudamérica, lo que acrecentó la presión sobre el presidente Emmanuel Macron en los días previos a una tradicional feria campesina en París.
La agricultura se ha convertido en un obstáculo en las negociaciones entre la Unión Europea (UE) y el bloque de países sudamericanos Mercosur para alcanzar un extenso acuerdo comercial. Las fricciones apuntan a cuánto acceso debería dar el Viejo Continente a la carne de res de América del Sur.
Los reportes que aseguran que los negociadores europeos incrementaron el acceso para la carne del Mercosur enfurecieron a los agricultores de los principales centros ganaderos europeos, como Francia, donde dicen que el alimento sudamericano, el cual es más barato, no cumple con los requisitos sanitarios y normas medioambientales de la UE.
La preocupación por las conversaciones con el Mercosur aumentaron las tensiones en el sector agrícola francés, después de que planes para reajustar los subsidios a los desfavorecidos cinturones campesinos provocaran protestas en las semanas recientes.
“Macron está cumpliendo sus promesas sobre el tema de los precios pagados a los agricultores”, indicó Christiane Lambert, directora del principal sindicato francés de granjeros (FNSEA), al canal de noticias BFM TV.
“Pero no puedes decir a la gente que eleve la gama, produzca bienes de calidad y luego abrir las amplias fronteras de Europa a productos que competirán usando estándares de calidad muy diferentes. Esta es la inconsistencia que queremos resaltar”, agregó.
Las representaciones de la FNSEA organizaron protestas con tractores en toda Francia, pasando por ciudades como Burdeos y Nantes, donde mostraron pancartas con lemas como “Detener el Mercosur” y “Macron, traición”. También se reunieron ante edificios gubernamentales.
Pequeños grupos de agricultores bloquearon además el tránsito en distintas zonas, entre ellas una congestionada autopista cerca de Lyon, al sureste de Francia.
El gremio calculó que participaron alrededor de 20 mil agricultores en las manifestaciones en todo el país.
Las protestas se producen antes de una importante feria campesina anual en París, un encuentro que alcanza repercusiones políticas en la mayor economía agrícola de la UE y donde Macron deberá realizar una tradicional visita presidencial el sábado.
El ministro de Agricultura, Stéphane Travert, prometió que Francia buscará garantías para una competencia justa con la carne sudamericana y aseguró ayer ante la Cámara baja del Parlamento que entre las medidas podría haber un mecanismo de emergencia en caso de daños graves para el mercado de la carne de la UE.
