Por Greenpeace México, 14 de agosto de 2017

La diputada ciudadana Verónica Delgadillo presentó un punto de acuerdo en el que se exhorta a la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para que en el ámbito de sus funciones atiendan de manera urgente el problema del exterminio de las abejas por el uso no regulado de plaguicidas en México.

En rueda de prensa, expertos de Greenpeace México, el Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco (CIATEJ), la Red Temática de Toxicología de Plaguicidas, y la Federación Mexicana de Apicultores expusieron la delicada situación en la que se encuentra la apicultura debido a la mortandad masiva de abejas melíferas, teniendo pérdidas de colmenas desde un 30 hasta un 80% según información proporcionada por diversos grupos de apicultores del país

“Estamos hablando de un tema fundamental para la soberanía alimentaria del país, y para la salud de los ecosistemas y las personas”, señaló María Colín, asesora legal de Greenpeace México.

Sólo para poder dimensionar la importancia de las abejas y el proceso de polinización que realizan, la misma Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO) señala que de las especies de plantas cultivadas dentro del territorio mexicano, un 80% de estas dependen de un agente polinizador para su producción. Por lo tanto, se vuelve fundamental proteger al sector apícola.

En la rueda de prensa se evidencia que los plaguicidas, sobre todo los Neonicotinoides, contribuyen de forma importante a este problema, por lo que es fundamental establecer acciones para proteger a dicha especie polinizadora, fundamental para la subsistencia del sector agropecuario y la producción de vegetales en todo el país.

La diputada ciudadana señaló que el punto de acuerdo exhorta y tiene la finalidad de “Atender el problema en toda su dimensión, pues la apicultura y otras industrias como la agropecuaria se están viendo afectadas, además, pruebas científicas demostraron que los plaguicidas dañan a las abejas, al medio ambiente y tienen consecuencias en la salud de las personas y por último, que el gobierno está violando los derechos humanos al no trabajar para garantizar el derecho a un medio ambiente sano”.

María Colín, enfatizó la urgencia de transitar a una agricultura ecológica que no ponga en riesgo no sólo a los seres humanos sino también a otras especies, en particular a los polinizadores.

“Greenpeace ha demandado a la Cofepris, a través de una queja ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), una definición de Plaguicidas Altamente Peligrosos en la legislación nacional acorde a los estándares internacionales, políticas para su regulación y progresiva prohibición, así como contar con una normatividad que establezca límites máximos de residuos (LMR) de plaguicidas en nuestros alimentos, para proteger y garantizar el derecho a un medio ambiente sano, a la salud, a la alimentación, entre otros”, explicó Colín.

El investigador del CIATEJ, el Dr. Octavio Gaspar argumentó con base en estudios científicos que los plaguicidas, sobre todo del tipo neonicotinoide, contribuyen de forma importante en la intoxicación de las abejas, ya que tienen como blanco de acción su sistema nervioso, generando daños irreversibles que se traducen en la desorientación y pérdida de la memoria hasta parálisis y muerte.

“Estos residuos, entre otros, los hemos encontrado en muestras de miel y cera, inclusive a dosis letales en la misma abeja, de apiarios que han sido afectados”. “La mortandad de abejas es solo el detonante del mal uso de plaguicidas, otras especies polinizadoras también están en riesgo, la contaminación de los alimentos y la misma salud humana”, precisó.

Por parte de la del Federación Mexicana de Apicultores y la Red Temática de Toxicología de Plaguicidas, señalaron que la importancia de las abejas es clave para el medio ambiente por la polinización y en los últimos años se han reportado muertes de abejas en todos los estados del país siendo la primera desaparición masiva fue en el 2016 en la Comarca Lagunera y que el panorama no es sencillo, pues existe un riesgo grave contra la salud de los seres vivos ya que los compuestos se acumulan en los organismos y en este caso son compuestos hechos para matar y logran trastocar órganos blandos y crean tumores cancerígenos.

Responsabilidades de Sagarpa, Cofepris y Semarnat

El punto de acuerdo exhorta a la Sagarpa para que actúe de forma inmediata y se implemente una comunicación sobre el riesgo del el uso de plaguicidas, así como buenas prácticas para la producción de miel a efecto de que la agroindustria no ponga en riesgo la producción de miel por el uso de plaguicidas.

De forma similar se exhorta a la Cofepris para que regule y prohíba todo plaguicida que sea evidenciado como tóxico para los polinizadores.

A la Semarnat se le solicita que explique cuál es el programa de acción de protección y conservación de polinizadores. Por último, a las tres instituciones se les hace un llamado para que implementen lo establecido por los convenios internacionales en materia de uso de plaguicidas y sustancias tóxicas, como es el caso del Convenio de Rotterdam que establece la aplicación del consentimiento fundamentado previo a ciertos plaguicidas y productos químicos peligrosos en el comercio internacional, y el Convenio de Estocolmo que regula los contaminantes orgánicos persistentes.

Para mayor información o entrevistas comunicarse a la oficina de la Dip. Verónica Delgadillo García al teléfono 56281300 Ext 8324 o al correo electrónico            veronica.delgadillo@congreso.gob.mx