Alarma en Estados Unidos por los pollos ‘100% natural’ criados con ketamina

Una demanda de consumidores plantea que el tercer productor del país utiliza drogas prohibidas en la cría

Por La Vanguardia, 23 de junio de 2017

La ketamina puede llegar a lugares insospechados. Una demanda judicial presentada por un grupo de consumidores en Estados Unidos afirma que los productos de pollo “100% natural” de Sanderson Farms, tercer productor del país, contienen restos de esta droga. El caso enciende las alarmas al ser una muestra de publicidad engañosa y abuso de antibióticos en la industria.

El Servicio de Seguridad e Inspección de Alimentos (FSIS, por sus siglas en inglés) del Departamento de Agricultura analiza cada año miles de muestras de carne y productos avícolas en busca de residuos de ciertos medicamentos, pesticidas y otros contaminantes. Entre noviembre de 2015 y noviembre de 2016, llevó a cabo 69 inspecciones en instalaciones de Sanderson. En un tercio de las visitas se registraron restos no naturales en los productos.

En un tercio de las inspecciones se encontraron sustancias no naturales

En la demanda –lanzada por la Asociación de Consumidores Orgánicos, Amigos de la Tierra y el Centro de Seguridad Alimentaria- se contabilizan 49 casos en los que las muestras arrojaron “residuos que no son ‘100% Naturales’”, tal y como se anuncia la marca.

En cinco casos se halló en los pollos cloranfenicol, un potente antibiótico que puede causar pérdida de médula ósea en seres humanos y no está aprobado para su uso en animales que se convertirán en alimentos. En tres ocasiones se detectó ciprofloxacina de etileno, un metabolito de la ciprofloxacina, un antibiótico antibacteriano cuyos efectos secundarios pueden ser afectación al metabolismo y al sistema nervioso.

También se halló butorfanol, un analgésico opioide, y acetato de melengestrol, una hormona sintética no aprobada para su uso en aves de corral que se utiliza para aumentar el peso de los animales. Los análisis también produjeron 82 casos de “residuos no confirmados”, incluyendo la ketamina –algunos la utilizan como anestésico- y algunos pesticidas.

Si bien la demanda contra Sanderson alega que las sustancias fueron detectadas en análisis oficiales, haría falta un análisis adicional para confirmar la presencia de los “residuos no confirmados”.

El FSIS puede tomar medidas que comprenden multas y cierres de instalaciones. Los demandantes denuncian que el uso del vocablo “natural” en la publicidad es desde hace mucho tiempo una etiqueta indiscriminada para productos muy poco naturales.