Por Mercedes López Martínez para Vía Orgánica AC, El Universal, 24 de mayo de 2017

En México, un grupo activistas, ambientalistas, agricultores, estudiantes y artistas se manifestó el pasado sábado 20 de mayo en el Ángel de la Independencia y marchó contra Monsanto, sumándose a miles de personas que también protestaron en 400 ciudades de 40 países. América tuvo marchas en Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Uruguay, México, Puerto Rico y Estados Unidos.

Los temas comunes de las marchas -entre comunidades tan distantes- aparte de la condena a Monsanto, fueron la promoción de procesos agroecológicos que cuiden el medioambiente y a los insectos polinizadores, a favor de cadenas de producción y comercialización justas para las y los campesinos, por la salud de las poblaciones y la soberanía alimentaria.

En un ambiente festivo y acompañada por una batucada, la manifestación, convocada por el Carnaval del Maíz, se pronunció contra: 1.- Los crímenes de Monsanto, 2.- Tratados internacionales de libre comercio, 3.- La iniciativa de Ley General Sobre Biodiversidad; 4.- La apropiación y despojo de tierras comunales y así como 5- Celebrar los cuatro años de la Demanda Colectiva contra la siembra de maíz transgénico en el campo nacional.

Es importante recordar que Monsanto, es una empresa estadunidense creada en 1901, conocida por sus productos químicos y semillas transgénicas, que fue comprada por Bayer recientemente.

En abril del presente año un tribunal internacional conformado por cinco jueces y juezas de reconocido prestigio, encontró a Monsanto culpable del delito de ecocidio, de crímenes de guerra, de violaciones de los derechos a un medio ambiente sano y equilibrado, a la salud y a la alimentación, y de quebrantar la libertad científica en todo el mundo.

El tribunal fue impulsado por más de mil organizaciones no gubernamentales de todo el mundo, entre ellas Organic Consumers Association, Navdanya, IFOAM Organics International, Biovision Foundation y Regeneration International. Si bien el tribunal fue simbólico, sus conclusiones empezarán a ser usadas en demandas en todo el mundo, para intentar que se modifique el Estatuto de Roma y se incluya la figura del ecocidio.

Durante el mítin previo a la marcha, integrantes de organizaciones civiles y de la academia como Vía Orgánica la RMALC, UNAM y San Salvador Atenco hablaron sobre el Tribunal Monsanto; los Tratados de Libre Comercio; la Ley de Biodiversidad; y la Defensa de territorios, en especial el caso de Atenco.

La marcha concluyó en la glorieta a Cristobal Colón, donde luego de leer un pronunciamiento del Carnaval, firmado por 24 organizaciones y diversas personalidades (Anexo) se presentó un sketch por el teatro de Vía Orgánica, para hacer conciencia sobre las semillas genéticamente modificadas de Monsanto. El evento cerró con una poesía a favor de la madre tierra.